miércoles, 22 de mayo de 2013

Mi manager capítulo 2



Bueno y después de otros mil años dejo el capitulo 2 XDD lo siento ;3; es que además he tenido problemas con mi internet y mi pc! pero ya quedó todo arreglado, espero que os guste el capítulo y a ver si voy subiendo más cosas :3 Gracias por leer, os quiero <3


Capítulo 2:

Al día siguiente después de clases salí corriendo hacía el nuevo trabajo. Cuando llegué al edificio me pare en la puerta, estaba bastante nerviosa, apreté con fuerza mi mochila, trague saliva y subí lentamente las escaleras. De repente se abrió la puerta, era Morikawa.
-¡Rina-san!-dijo al verme y bajó corriendo cogiéndome del brazo y llevándome hacia el interior- Estaba ya impaciente porque llegaras- dijo sonriendo- te presentaré al grupo-
-¿EH? Ah.. sí sí- dije algo confundida sin saber qué hacer.
-Ven conmigo- dijo yendo por un pasillo, lo seguí mirando todo mi alrededor impresionada. Recorrimos un gran pasillo hasta llegar al ascensor, cuando por fin llegamos a la novena, que era la última planta. Se abrió el ascensor y me cogió de nuevo yendo por el pasillo que había a la derecha. Se veía bastante grande el edificio y algo vacío, desde que entre había alcanzado a ver a solo 2 o 3 personas, pero supongo que era porque estaban en las salas de ensayo, Morikawa me dijo que se exigía mucho en aquella agencia.
-Es por aquí- me decía, yo aceleraba el paso pero aún así me llevaba arrastrando.
-Ya hemos llegado- dijo parándose por fin frente a una puerta con un cartel que ponía “Sexy Zone”, luego de unos escasos minutos parado frente a la puerta, tomó aire para tranquilizarse y la abrió entrando.
-Hola chicos- dijo sonriendo, yo lo seguí pero me quedé en la puerta esperando que Morikawa me diera la señal para poder entrar.  Era una sala bastante grande, consistia en una sala principal amueblada en la que en el centro había tres sillones y una mesita,bastante espaciosa, pero dentro de la habitación, en el fondo, había tres puertas las cuales también eran pequeñas habitacionesCuando Morikawa entró estaban todos sentados en los sofás, cada uno distraído con sus cosas pero había uno de ellos, Fuma, el cual estaba sentado con las piernas cruzadas, con una expresión seríacercó a ellos, a mirando una revista. Morikawa se acercó sigilosamente a ellos.
-Vengo a daros una noticia-
-¿Eh? ¿El qué?-preguntaron los más pequeños algo curiosos ante la seriedad de Morikawa
-Bueno, escuchadme, vais a tener una nueva manager que trabajará junto conmigo, es una chica y de la edad de Kento y Fuma-dijo sonriendo
-¡¿EHHHH?!-todos se quedaron asombrados, Fuma levantó la mirada, parecía interesado en el tema.
-Se llama Rina-dijo sonriendo señalándome y haciéndome un gesto para que pasara. Entré y saludé con una pequeña reverencia, estaba muerta de la vergüenza y no sabía como reaccionar.
-¡ALA!- los dos más pequeños vinieron corriendo hacía mi abrazándome.
-Mira, les gustas-dijo Morikawa sonriendo.
Fuma se levantó
-¿Y por qué?-dijo serio  con aires de superioridad, la verdad es que me daba muy mala espina.
-Bueno he pensado que… estaría bien…-dijo Morikawa asustado, parecía que era el chico al que le tenía tanto miedo.
Fuma se acercó lentamente mirándome de arriba abajo.
-Venga Fuma, se la ve buena chica-dijo Kento sonriendo con amabilidad, yo le devolví la sonrisa tímidamente.
-Bueno…será divertido-dijo dibujando una sonrisa en su rostro, al verle me recorrió un escalofrío todo el cuerpo, presentí que desde aquel día mi vida no iba a ser muy buena.
-¡Perfecto!-dijo Morikawa ilusionado ya que todo había salido perfecto – Os dejo que os vayáis conociendo- dijo mientras salía corriendo.
-¡¿EH?!-fui tras él hasta la puerta -¡no me puedes dejar aquí!-le grite desde la puerta, él se giró juntando sus manos y agachando un poco la cabeza a modo de disculpa y se fue corriendo.
Entré sonriendo nerviosa y me senté en el sofá sin saber qué hacer, el panorama no era muy agradable, más bien estaba bastante incomoda ya que todos me miraban fijamente.
-Bueno…-dije para romper ese silencio mientras miraba a mi alrededor- que sitio más grande ¿no?-
-Lo siento, te debes de sentir incomoda- dijo Kento levantándose del sofá –Nos presentaremos-
-Oh, no hace falta, se quienes sois-dije sonriendo ampliamente- habéis debutado hace poco ¿verdad?-
-¿Entonces nos conoces?- preguntó Sou sonriendo
-¡Claro! Tú eres Matsushima Sou –
-¡Guau! ¡No sabía que era tan famoso!-
Reí al verlo tan feliz
-Y Yo Marius, Sato Shori, Nakajima Kento y Kikuchi Fuma-dije sonriendo mientras señalaba a cada uno.
-¡Ala!-me dijeron aplaudiendo, salvo Fuma que estaba sentado en el sofá ojeando de nuevo la revista de antes.
-Bueno te enseñaremos un poco todo esto-dijo Kento sonriendo
Kento se levantó y me llevo hasta el fondo de la sala donde estaban las pequeñas salas que había visto antes.
-Estos son una especie de camerinos, donde nos cambiamos y descansamos ¿ves? Tienen camas –dijo señalando unas camas que había al final, pegadas a la pared, cada sala tenía doscamas, espejos, un sofá y la ropa que se ponían en las actuaciones.
-Guau~ son enormes –dije impresionada
Salimos de las salas y Fuma se levantó del sofá
-¿Y qué se supone que eres?- dijo con aire de superioridad yendo hacia donde estábamos.
- ¿Eh? ¿Yo? –dije señalándome.
-No, la maceta de ahí detrás-dijo con un tono irónico, yo fruncí el ceño algo enfadada, era demasiado borde. –Bueno di, ¿para qué estás aquí?-
-Bueno… soy vuestra manager o algo así, Morikawa me dijo que era como si fuera vuestra niñera- dije asintiendo mientras miraba a los demás ya que yo tampoco entendía muy bien de que iba mi trabajo.
-Bueno más que nada ser como nuestra sirvienta ¿no?-dijo sonriendo de lado, no me gustaba nada esa sonrisa, me daba mala espina.
-No digas eso Fu, que la vas a asustar-dijo Kento riendo
-Es que su trabajo es su trabajo-dijo sentándose de nuevo en el sofá
-Anda te enseñaré el resto del edificio- me dijo Kento llevándome hasta la puerta.
Me llevó por todo el edificio explicándome las distintas salas, despachos de otros grupos, salas de baile... en fin todo lo que tenía que saber para poder moverme bien por allí.
-Bueno y… no hagas caso a lo que ha dicho Fu, aunque algo de razón tiene-
-¿Eh? ¿Tengo que ser vuestra sirvienta?-
- Más bien nuestra niñera-
Lo miré con el ceño fruncido ladeando la cabeza porque no entendía muy bien, ¿cómo que ser su niñera? Ya eran bastante mayorcitos…
-Te explico, Morikawa te ha contratado para que estés las 24 horas con nosotros, es decir, para que nos acompañes y nos ayudes durante ensayos, conciertos, entrevistas y todo lo que hagamos del grupo, eso es lo que hacía Morikawa más hacer los contratos y esas cosas-
-¡Ah! Entiendo- dije asintiendo con la cabeza varias veces seguido.
-Pero nosotros te trataremos bien, aunque Fu al principio es difícil de entender-dijo riendo- Es malo-
-¿Pero me aceptará?- pregunté algo preocupada.
-¡Claro! Si seguro que también está encantado de tenerte-dijo sonriendo.
Las palabras de Kento me calmaron un poco, esperaba poder integrarme pronto porque en el fondo no me disgustaba mucho el trabajo.
--Continuara--

miércoles, 17 de abril de 2013

Aquel caluroso verano

Bueno después de 1254 años sin escribir aquí les traigo un oneshot que hice hoy *///* espero que les guste :3


Autor: Anachan.
Titulo: Aquel caluroso verano.
Género: yaoi
Parejas: Sou-Marius.

Aquel caluroso verano


Comenzaba el mes de agosto y con ello las vacaciones. Las calles se empezaban a llenar de niños jugando,  todo el mundo tenía ganas de vacaciones menos Sou, a él no le gustaban nada, les parecían bastante aburridas, sobretodo porque sus padres lo obligaban a irse con ellos de vacaciones al pueblo de su padre. Era un pueblo bastante tranquilo, rodeado de un bosque muy conocido, mucha gente iba allí de acampada pero para un niño, era bastante aburrido puesto que solo vivían personas mayores.
Aquel verano no iba a ser distinto, en cuanto le  dieron las vacaciones hicieron las maletas y se fueron.
-¿Qué te ocurre?- preguntó la señora Matsushima al ver a su hijo tan cabizbajo mirando a través de la ventana con la mirada perdida en el paisaje.
-Nada... es solo que estoy cansado-dijo evitando la pregunta, sabía que como dijese algo su padre le echaría la bronca, por lo que prefería guardárselo, de todas formas... nada iba a cambiar.
Después de un largo viaje por fin llegaron al pueblo, la abuela salió corriendo en su busqueda, tenía muchas ganas de ver a su nieto, así que en cuanto lo vio salió corriendo a abrazarlo. Pero Sou era demasiado mayor ya para recibir tantos mimos de su abuela, no le hacía nada de gracia.
-Sou cariño, lleva las maletas dentro-le dijo su madre en un tono dulce.
-Si~-dijo algo desganado cogiendo las maletas y llevándoselas al cuarto.
"Me voy a aburrir demasiado en este estúpido pueblo" dijo para sus adentros pero aquel verano iba a ser totalmente distinto. Después de un rato echado en la cama, decidió irse a dar una vuelta, por hacer algo. 
Ando y ando sumido en sus pensamientos, pensando en lo bien que se lo estarían pasando sus amigos en la ciudad yendo a la piscina, al cine y a todos los sitios divertidos que se les pudieran ocurrir... 
-¡ODIO ESTE PUEBLO!-gritó con todas sus fuerzas y se apoyó en una de las paredes de una casa. De repente notó una mirada clavarse en él, giró la cabeza a un lado y allí estaba escondido detrás de una farola, un chico de pelo castaño, piel blanca y ojos negros de mirada inocente. Al darse cuenta de que le estaba mirando el chico salio corriendo. Sou se quedó algo extrañado, era un tanto extraño ese chico y en todos los años que había ido allí al pueblo nunca lo había visto además no tenía rasgos completamente japoneses. Le daba curiosidad quien podría ser  pero no le dio más importancia y volvió de nuevo a la casa. 
Pasaron un par de días que se le hicieron eternos y aún le quedaba estar allí todo el mes, parecía una tortura. Aquella tarde de martes calurosa y aburrida decidió salir al patio y quedarse sentado escuchando música. Cogió su móvil, se puso los auriculares y puso la música a todo volumen para sumirse en sus ideas. De repente abrió los ojos y se encontró al chico de ayer mirándole fijamente desde encima de la pared de la casa de al lado. Pero al igual que ayer al ver que se había dado cuenta se bajo y salió corriendo pero esta vez Sou tomó el impulso de salir detrás de él.
-¡Espera!-Gritó levantándose de la silla dejando allí su móvil, y fue corriendo hasta la casa, la cual podías pasar al jardín ya que estaba abierto. Sou se paró un instante antes de entrar en la casa, ya que en el fondo sabía que si pasaba estaría haciendo algo malo, pero al final la curiosidad por aquel chico le incitó a pasar. Entro lentamente para no hacer ruido, buscando con la mirada al chico, allí junto a la pared vio la silla donde se había subido el chico pero de él no quedaba ni rastro. Cuando se iba a dar por vencido sonó una voz dulce.
-Hola-dijo desde el fondo del patio
Sou se giró y allí estaba el chico, escondido en una esquina de la casa con la misma mirada de ayer.
-Hola-le contestó mirándole curioso-¿Qué haces ahí?-
-Me da vergüenza...-le dijo tímidamente.
Sou sonrió soltando una pequeña risa 
-Que no te de vergüenza-le dijo sonriendo mostrandole confianza para que se acercara a él -¿Cómo te llama?-
El chico  se apartó de la esquina y se acercó a él, era alto pero seguía pareciendo más niño que él, su piel era pálida aunque sus mejillas eran sonrosadas. 
-Me llamo Marius-dijo sonriendo dulcemente, lo que hizo que algo dentro de Sou "se moviera".
-¿Por qué me seguías ayer?-
-Es que me aburro aquí, no hay nadie de mi edad y ayer te vi llegar y pensé que podría ser tu amigo pero... me daba vergüenza... no manejo muy bien el japones-
-¿No lo manejas bien?-preguntó extrañado Sou.
-Sí, es que soy medio alemán medio japones y me mude hace unos años a japón por lo que aún no hablo bien...-
Sou soltó una pequeña risa y mirándolo dulcemente le dijo
-No te preocupes por eso, si hablas conmigo practicarás, no tienes porque tener miedo-
A partir de ese momento empezaron a pasar los días juntos, jugando,practicando el idioma... Sou ya no quería que se pasaran rápido los días, no quería volver a la ciudad, los días con Marius eran geniales y no quería que eso acabase.
-Sou~-gritó Marius desde la puerta, Sou estaba durmiendo, el día anterior había sido bastante duro y estaba muy cansado por lo que se había quedado durmiendo, aunque al oír la debil voz del chico se despertó corriendo.
-Marius, Sou está en su habitación-dijo la madre amablemente saliendo al encuentro del niño-pasa a ver si tú consigues despertarlo-
-¡Vale!- Marius entró corriendo, Sou al oirlo se hizo el dormido para ver como reaccionaba el pequeño.
-Sou~-dijo entrando en la habitación-he traido helados- levantó la mano con los dos helados de chocolate, cada uno en su bolsita, a Sou le encantaba el helado pero en ese momento decidió seguir con la broma y hacerse el dormido.
-¿Sou?-preguntó el pequeño al no recibir respuesta pero solo consiguió un silencio enorme, dejó los helados encima de una mesita que había en el medio de la habitación, y se fue a la cama. -Sou despierta-dijo moviendolo pero Sou, aguantándose la risa, seguía con los ojos cerrados.
-¡Sou!-dijo en un tono quejica acercándose a su cara para ver si despertaba, Sou notó como se acercaba a su cara, como estaba a poco centímetros y notaba su respiración y, sin entender el por qué, aquello hizo que su corazón palpitara más fuerte y sus mejillas se pusieran totalmente rojas. -¡Sou despierta ya!-le dijo clavandole el dedo en la mejilla.
-¡Ya, ya!-dijo abriendo los ojos sonrojado, incorporándose deprisa.
-¡por fin! Pensé que moriría esperando...-dijo frunciendo el ceño molesto.
-Es que estaba cansado..-replicó él algo confuso por lo que le acababa de ocurrir.
-Traje helados-cogió los helados de la mesita y se los mostró sonriendo ampliamente.
-¿De que son?-preguntó relamiéndose.
-De chocolate y vainilla-respondió feliz.
Abrieron los helados y se los empezaron a comer tranquilamente en silencio. Sou se fijo en los labios del pequeño, "parecen apetecibles" pensó sin poder dejar de mirarlos, cuantos más los miraba más los quería probar, le picaba la curiosidad a qué podrían saber pero cuando se dio cuenta de lo que estaba pensando apartó la mirada corriendo, "¡¿En qué pienso?!" pensó alterado para si mismo. 
-¿Pasa algo?-le preguntó el pequeño al verlo tan nervioso.
-N-no es nada...-respondió nervioso- Es solo que me acabo de despertar y aún estoy algo dormido-
Desde aquel momento, no dejaba de pensar en esos labios, en que cada vez le apetecían más, no había momento en el que no los mirase, solo podía pensar en el pequeño y en sus labios... "Me voy a volver loco" dijo echándose en la cama tapándose la cara con ambas manos. Ya no sabía que hacer, no podía pensar en otra cosa... 
-¿Y si los pruebo?... quizás así se me quite todo esto...-dijo en voz alta mirando al techo.
-¿Qué quieres probar?-preguntó el pequeño el cual entraba por la puerta.
-¡¿Qué haces aquí?!-preguntó Sou dando un salto asustado por el chico.
-Quería verte-
"Quería verte", aquella insignificante frase había hecho que una felicidad enorme recorriera el cuerpo de Sou.
-¿Ah sí? me echabas ya de menos ¿no?-dijo en tono burlón.
-Eres tonto-dijo entre risas el pequeño-me aburría sin ti, ¿qué haces?-
-La verdad es que nada, estaba echado en la cama-
-Vamos a jugar~-
-¿A qué?-preguntó echándose de nuevo en la cama.
-No sé... algo divertido.. ¡me aburro! ¡Vamos al río!-
-¿Al río quieres ir?-
-¡Sí!, que hace calor-
-Bueno~ vamos al río-
Cogió una pequeña mochila y echó algo de bebida y comida y se fueron hacia el río, era un día bastante caluroso por lo que ir al río era la mejor opción. Llegaron a una parte plana donde se podía jugar y donde había algunas piedras para sentarse.
Sou soltó la bolsa, se quitó los zapatos y se fue a la orilla del río a refrescarse.
-Que bien sienta esto...-dijo en voz baja aliviado.
-¡Sou vamos a meternos!-dijo el pequeño quitándose la camiseta. Sou se quedó mirando su pálido pecho embobado, ahora ya no solo le gustaban sus labios... le gustaba todo de él... y verlo así le ponía algo nervioso. 
Después de la camiseta, el pequeño se quito los pantalones quedándose en boxers, Sou apartó la mirada deprisa, el solo hecho de verlo así le ponía muy nervioso, pero si no quería levantar sospechas en el pequeño tendría que aguantar y fingir como fuera.
Se quitó la camiseta y los pantalones quedándose también en boxers y se metió corriendo en el agua, a ver si está le calmaba.
-¡Oye pero espérame!-dijo el pequeño metiéndose corriendo junto a él.
Estuvieron un buen rato jugando y nadando con lo que la energía del pequeño acabó rápidamente  Se salieron a la orilla y se sentaron a comer, después de comer, Marius se quedó durmiendo sobre el regazo del mayor. Este no paraba de mirarlo mientras le acariciaba suavemente el cabello. 
-¿Y si aprovecho ahora?-dijo en voz baja mientras lo miraba. "Total... está durmiendo, no se dará cuenta"dijo mientras acercaba lentamente su cara pero a poco centímetros de sus labios paró "tú puedes... no se dará cuenta" se decía así mismo pero algo le impedía seguir por lo que al final decidió parar, "Ya lo haré" se dijo sonriendo mientras seguía mirándolo sonriendo con dulzura. Se podía decir que le encantaba mirarlo, de echo muchas tardes se las pasaba mirando al pequeño, no se le escapaba ni el más mínimo detalle de nada de lo que hacía.
Los días fueron pasando y las vacaciones pronto llegarían a su fin y eso temía Sou por encima de todo, no quería separarse del pequeño, para él era muy especial... tan pronto como fueron avanzando los día también llegó el día del festival de verano que se celebraba en el pueblo, para Marius era la primera vez que iba por lo que no se lo quería perder y por supuesto Sou tampoco se perdería ir con él.
Ambos vistieron un yukata, en el festival casi todo el mundo iba con el yukata, estaba lleno de puestos de comida y de mascaras, el festival era muy famoso por lo que mucha gente iba así que el pueblo se llenaba de familias con sus hijos pequeños y de parejas de novios.
-Marius, no te separes que si no te vas a perder y luego no sé donde estarás- le dijo preocupado al ver tanta gente. Marius lo miró sonriendo y le cogió de la mano.
-Así no me perderé-le dijo con una gran sonrisa, Sou se sonrojó pero su mano era tan cálida que no la quería soltar jamás.-Oye compramos de eso-dijo señalando un puesto de bolitas de pulpo-
-¿Eso te apetece ahora?-
Marius asintió con la cabeza y el mayor cumplió sus deseos y mientras iban andando tranquilamente por todo el festival mientras comían a Marius hubo algo que le llamó la atención.
-Sou...-dijo con la boca llena, el mayor que estaba distraído giró la cabeza mirándolo.
-Dime-
-¿Qué hacen?-dijo mientras señalaba a una pareja que se estaban besando, Sou al mirar la escena se atragantó poniéndose nervioso.
-S-se están besando-dijo aclarándose la garganta.
-Mmm ¿y por qué?-
-Pues porque se quieren... eres mayor ya para saber eso-dijo intentando que parase.
-Lo sé-dijo riendo-pero es que con esos temas te pones nervioso, que te he visto- y el pequeño tenía razón, ya que cada vez que Sou veía a una pareja besarse no podía evitar imaginarse a él besando a Marius y eso hacía que se pusiera muy nervioso.
-¡Eres malo!-dijo riendo mientras le hacía cosquillas en los costados, el pequeño se apartó riendo.
-Pero... la verdad es que nunca he besado a nadie-dijo llevándose el dedo a los labios.
-¿Nunca?-
-No...¿tú sí?-
-¡Claro!-vaciló- he besado a muchas chicas- lo cual exageraba ya que solo había besado a su tía cuando aún era muy pequeño.
-Ah... ¿y cómo es?-preguntó curioso.
-Sabe rico-mintió pero tuvo el impulso de preguntarle -¿quieres probar?-
-¿Probar?-le dijo el pequeño.
-Sí para saber como es un beso, lo pruebas conmigo que tienes más confianza-dijo rápidamente decidido, quería por todos los medios besarlo y aquella era una perfecta oportunidad.
-Vale-dijo tímidamente.
El mayor lo cogió de la mano y lo llevó detrás de los puestos para que no los viera nadie.
-Para que no te de vergüenza nos venimos aquí detrás que no te ve nadie ¿vale?- 
El pequeño asintió sonriendo.
-A ver... primero tienes que cerrar los ojos-le indicó el mayor y el pequeño le hizo caso enseguida.-Ahora me acerco lentamente ¿vale?- 
-Sí~-respondió el pequeño aun con los ojos cerrados.
Sou trago saliva, no podía creer que al fin pudiera besarlo, le agarró de los hombros y se acercó lentamente, cuando estuvo a poco centímetros cerró los ojos y posó sus labios sobre los del menos. Fueron unos segundos pero fue de lo mejor, no se había equivocado, eran geniales.
Cuando se aparto, lo miró riendo levemente, el menos aún estaba con los ojos cerrados.
-Ya los puedes abrir ¿eh?- le dijo entre risas.
-A-ah sí-dijo sonrojado.
-Bueno ¿y qué te ha parecido? ¿te ha gustado?-le preguntó nervioso por si la había cagado.
-Sí...-dijo sonrojado mirando al suelo- me ha gustado-
-¡¿De verdad?!-le preguntó sorprendido e ilusionado al mismo tiempo.
-Sí, quiero más-le pidió el pequeño mirándole a los ojos, sonrojado, Sou se estaba derritiendo al verlo así y se moría de ganas de besarlo de nuevo.
-Ven~-le dijo mientras lo cogia de la mano y se lo llevaba hasta un pequeño parque que había alrededor-Aquí nadie nos va a molestar-dijo sentándolo en un banco-te voy a dar un beso diferente ¿vale? más largo-dijo sonriendo, y así sentándose a su lado, cogió al menor por la cintura para acercarlo a él y lo beso, esta vez diferente, profundizando el beso, disfrutando de cada segundo.
Aquella noche sin duda fue la mejor de todas sin embargo, el verano ya había llegado a su fin y tenían que volver de nuevo a la ciudad, aquello le partía el alma a Sou... ahora que había conseguido al pequeño no quería perderlo.
-Sou, cariño, despídete ya y coge tus maletas-le dijo la madre que estaba en el coche organizando el equipaje.
-Sí~, ven Marius-dijo llevándolo de la mano al interior de la casa.
-No quiero que te vayas...-
-Yo tampoco pero me obligan... ¿tú también vuelves mañana?-
-Sí...-
-Bueno, me esperarás ¿verdad? hasta el verano que viene-le preguntó a lo que el chico le contesto asintiendo con firmeza y le dió un rápido beso, sonriendo después sonrojado.
-Anda ven-dijo Sou sonriendo y le cogió de la cintura para pegarlo a él y le dio un beso- Eres mio-le susurró- y diciendo esto se despidieron.
Aquel verano había sido diferente, más bien había sido el mejor verano de su vida pero aún le esperaba algo en la ciudad que sería aún más genial.
FIN

domingo, 24 de febrero de 2013

Secretos, capítulo 10

Hola! perdón por tardar tanto >//< es que he estado algo ocupada y cuando quería ponerme pues... se me olvidaba *^* sí soy especial XDD bueno aquí os dejo la continuación, es corta pero es que.... quiero dejaros con la intriga e////e soy mala persona, mentira pero bueno espero que os guste ;///;

Capítulo 10:

Después de aquello tuve que aguantar ver día a día como Yamachan iba con la chica esa... claro su relación si podía saberse, no como la nuestra. Todo esto cada día me hacía más daño aunque yo aún seguía queriéndolo pero no podía estar con él sin que estuviera Takahashi...
Aquel día después de clases había quedado con Yamachan, me había prometido estar la tarde conmigo.
-¡Chinen!-dijo viniendo a mi clase corriendo.
-Ah hola Yamachan-dije sonriendo- ¿Nos vamos ya?-
-Eso te quería decir...-se quedo un momento en silencio y junto sus manos poniéndolas a la altura de su cabeza- ¡Lo siento! es que tengo que ir con Takahashi y sus amigos, pero te prometo que esta noche voy a tu casa ¿vale?-me dijo sonriendo
-Claro...-le contesté sonriendo falsamente, desde que había empezado a salir con ella ya nunca tenía tiempo para mi... 
Yamachan se fue corriendo con Takahashi, yo cogí mis cosas y me fui dando un paseo, no me apetecía ni siquiera ir a mi casa, por el camino me encontré con Takaki.
-Hey Chinen-me dijo saludando desde lejos.
-Hola-
-¿Te pasa algo?-me preguntó extrañado- te veo apagado-
-Bueno...-
-Anda ven, te invito a un batido y si quieres me cuentas ¿de acuerdo?- me dijo sonriendo, yo asentí con la cabeza y fuimos hasta la cafetería más cercana.
-Y bien ¿qué te pasa?-me dijo en cuanto nos sentamos en la mesa y pedimos las bebidas.
-Pues.... no sé como empezar-
-Tomate tu tiempo-
Mientras yo estaba en silencio pensando en como contárselo sin que se me hiciera un nudo en la garganta, nos trajeron las bebidas, él dio un sorbo a su batido de vainilla mientras me miraba fijamente.
-Mira, dale un sorbo a tu batido de chocolate y ahora me cuentas tranquilamente-
Yo asentí haciendo lo que me dijo, respiré hondo y comencé a contarle.
-Es que... Yamachan está saliendo con una chica-
-¿C-cómo..?-dijo algo perplejo al oírme.
-Lo que oyes... resulta que es la hija de yo no se quien y si sale con ella puede ir a la universidad....-
-Pero... ¿lo habéis dejado entonces?-
-Que va.... él dice que nosotros seguimos...-
-No me lo puedo creer-dijo Takaki frunciendo el ceño- Que cara tiene...-
-Sí... pero yo lo sigo queriendo... y sé que soy tonto pero...-
-No eres tonto Chinen... es él-
-¿Sabes? no me encuentro bien, me voy ¿vale? lo siento...-
-No pasa nada ¿quieres que te acompañe?-
-No-dije negando con la cabeza- necesito estar solo-
-Entiendo...-dijo Takaki algo triste y preocupado, yo me levanté, cogí mis cosas y me fui.
"Lo mejor será alejarme de él" eso fue lo que pensé de camino a casa.
--
En la hora del almuerzo fui corriendo a la clase de Chinen, ya que no lo había visto por la mañana. Miré por todos lados pero no había ni rastro de él, así que decidí preguntarle a alguien de la clase por si lo había visto.
-Oye Yuta ¿has visto a Chinen?- 
-Que va, hoy no ha venido-
-¿No?-pregunté extrañado- Bueno vale, gracias-
Me volví a la clase, era bastante raro que no hubiese venido a clase.
-Ryosuke-me dijo Takahashi sonriendo ampliamente -¿Dónde estabas?- me dijo acercándose a mi dándome un beso.
-Estaba buscando a Chinen-le contesté sonriendo.
-Déjalo que seguro que esta ocupado-
-Puede ser- 
Pero pronto supe que no estaba ocupado, en tres días no apareció por el instituto por lo que ya me estaba mosqueando, él nunca faltaba, pasará lo que pasará, así que decidí ir a su casa pero me llevé otra sorpresa.
-Ah hola Yamada-me dijo su madre sonriendo al abrir la puera.
-Hola, ¿está Chinen?-
-No, no está-
-Ah...- aquello me extraño muchísimo -¿Y a qué hora volverá?-
-Está fuera así que... volverá en unos días...-me dijo su madre seria- te dejo, que estaba haciendo la cena-y diciendo esto me cerró la puerta sin darme tiempo a despedirme pero lo que más confuso me tenía es que ni siquiera me había avisado. Lo llamé al móvil pero tampoco me lo cogía.
Después de eso pasaron los días e incluso semanas y no sabía nada de Chinen, lo que me tenía bastante preocupado.

--Continuara---



lunes, 11 de febrero de 2013

Mi manager

Bueeeenas a todos *^* si me había perdido nuevamente e///e pero yo os quiero, me matareis por esto y se que dije que volvería con el otro fic peeeero es que he empezado a escribir esto, fue una inspiración divina XDD Prometo seguir con el otro pronto de verdad ewe pero mientras os dejo este *///*

AVISO: no es yaoi >.< pero leedlo ;3; creo que os gustará os eso espero >///<. Bueno es un fic con los sexy zone :3 espero que os guste!!

Capitulo 1:


-Rina-chan ¿te vienes al karaoke?- preguntó Ayaka al salir de clases.
-¿EH? Bueno… es que… no puedo- dije sonriendo un poco rascándome la nuca esperando que no se enfadara.
-¡¿EH?! ¿Otra vez con el trabajo?-
Asentí lentamente –Tengo que buscar uno nuevo… ya que me han echado de la tienda- dijo suspirando.
-¿Y eso?-me preguntó preocupada.
-La dueña ha cerrado… dice que está ya muy mayor para seguir trabajando- asentí
-Rina-chan… no me gusta verte siempre ocupada con trabajos… ¡tienes que salir a divertirte!-dijo poniéndome morros.
-Ayaka… hablas como una mujer mayor- bromee entrecerrando los ojos.
-¡Tonta!-dijo pegando flojito en el brazo- pero bueno por esta vez te dejaré pero la próxima vez…-
-¡Iré contigo!-dije sonriendo mientras me despedía de ella.
Mi familia era pobre, mi madre trabajaba a medio tiempo en un supermercado y mi padre en una empresa pero ambos tenían un sueldo muy bajo por lo que me tocaba aportar dinero, así que siempre estaba en algún trabajo después de clase pero tenía tan mala suerte que siempre me echaban… era difícil para mi ya que aún estaba en secundaria y aunque es mi último año muchos no me quieren contratar por eso.
Fui al centro  dela ciudad, allí había bastantes bares y tiendas en las que me podrían contratar. Aunque después de horas y horas buscando en ningún sitio me querían.
-Ahh~ -suspire sentándome en unas escaleras de un gran edificio- ¡así en imposible!-grité desesperada escondiendo la cabeza en mis piernas.
-¿Te ocurre algo?- preguntó una voz de hombre que sonaba desde arriba de las escaleras
Levanté la cabeza al oírlo y me giré, en la puerta del edificio había un hombre vestido de traje de chaqueta, con un maletín en sus manos, no parecía muy mayor.
-¿Eh? Bueno es que…-
Bajo a toda prisa las escaleras hasta ponerse delante mia.
-¿Te puedo ayudar en algo?-
-Bueno… -contesté con un poco de miedo, se veía bastante raro- es solo que estaba buscando trabajo y…-
-¡¿Trabajo?!-me preguntó sin dejarme terminar.
-Sí…- cada vez me parecía más raro, comencé a echarme un poco para atrás mirando a mi alrededor.
-¿Qué tipo de trabajo buscas?-dijo mientras buscaba a toda prisa algo en su maletín.
-No busco ninguno en concreto…-
-¡Perfecto!- me saco una tarjeta y me la ofreció. La cogí mirando “Morikawa Kazuo, manager” ponía.
-¿Te apetece trabajar de manager? –me miró sonriendo. Parecía algo desesperado por lo que no me fiaba mucho.
-Bueno… no sé…-dije dudosa.
-¡Por favor! ¡Tendrás una buena paga!-
-¿Una buena paga?-le pregunté curiosa.
Me invintó a una cafetería mientras hablábamos del trabajo.
-Tendrás una paga de 300 mil yens-
-¡¿EH?!- dije parando de beber el batido de chocolate que me había pedido –t-t-trescientos mil?!!!-
Morikawa-san asintió sacando los papeles del contrato.
-Pero… ¿por qué yo? Es decir soy aún una estudiante de secundaria alta…. No tengo experiencia-
-Te explico, serías la manager de un grupo de música de chicos de tu edad, Sexy Zone ¿te suena?-
-¡Claro!-dije abriendo mucho los ojos- Es el nuevo grupo que acaba de debutar-
-Exacto, yo soy su manager pero hay uno de ellos que es… como decirlo… especial… tiene un genio un poco malo y al verte se me ocurrió la idea de que si una chica era la encargada…. A una chica no le pueden hacer nada, además llevo ya tiempo con la idea en la cabeza y bueno mi jefe está de acuerdo-
-Bueno… si voy a ganar tanto dinero… ¡le podré comprar a mi padre ese ordenador que tanto quiere! Y ¡a mi madre el vestido!-dije emocionada imaginandomelo.
-¿Rina-san?- me llamo Morikawa haciéndome volver a la realidad- tienes que firmar aquí- me dijo dándome unos papeles con un boli.
La verdad estaba algo dudosa… ya que era todo bastante raro y bueno… con la mala suerte que tenía era todo demasiado bonito pero al final acepté, necesitábamos ese dinero.
-Ya está-dije sonriendo devolviéndole los papeles.
-Muchas gracias-dijo Morikawa, se le veía bastante feliz-comienzas mañana, ven corriendo después de clases, al mismo edificio de antes-
-Entiendo-asentí sonriendo y volví a mi casa. Estaba algo nerviosa, esa noche me costó dormirme quería llegar a mi nuevo trabajo, parecía interesante pero aún no sabía lo que me esperaba…

-Continuara-





domingo, 20 de enero de 2013

Secretos capítulo 9


Se acuerdan que dije que volvía con el fic verdad? bueno pues les mentí *//* porque sigo ocupada XDD pero me dio cargo de conciencia así que he decido escribir un poco más por ustedes e___e

Capitulo 9:

Se acabaron las vacaciones y volvimos a casa. Comenzaban las clases de nuevo y yo le tenía que contestar a Takahashi.
Era domingo, al día siguiente empezaban las clases y yo no podía parar de pensar. Estaba echado encima de mi cama en el cuarto mirando al techo cuando la puerta se abrió. Era Take.
-¡Hey!-saludó alzando la mano.
-¿Take? Qué haces aquí?-
-Bueno me aburría un poco y no sabía que hacer,además... -se callo un momento sonriendo ampliamente- quiero saber que le vas a contestar-
-¿Otra vez con eso?-
-Sí, eres mi colega y no quiero dejar que te equivoques-
-Pues la verdad es que no he dejado de pensarlo-
-Te voy a decir una cosa, voy a ir a comprar tabaco y cuando vuelva quiero que me digas que has pensado- y diciendo esto salió por la puerta.
Me quedé de nuevo pensativo, la chica no estaba nada mal la verdad, no me importaría salir con ella y si eso  hacía que tuviese la oportunidad de entrar en la universidad que tanto quería... ¿por qué no?.
Al cabo de unos minutos volvió Take, se sentó en el suelo al lado de la mesita, saco un cigarro del paquete y lo prendió con el mechero.
-Bueno ¿y? ¿Has pensado ya?-
-Sí, la verdad es que sí-
-Perfecto-se acercó a mi atento a lo que le decía.
-Pues le diré que sí-
-¡Así me gusta!-dijo contento dándome en el brazo.-Ya sabes que me tienes que decir como es- dijo señalándose el pecho- ya sabes-
-Tú solo quieres que salga con ella por eso ¿verdad?-
-Claro además así la compartimos-dijo riendo levantándose-bueno me voy un rato por ahí- dijo mientras se guardaba el paquete de tabaco en el bolsillo.
-Me has dejado olor a tabaco en el cuarto...-
-Se siente, así es la vida-
Lo acompañe hasta la puerta, cuando la abrí allí estaba Chinen.
-Ah hola Chinen-dijo Take saludando.
-Hola-respondió Chinen con una sonrisa.
-Bueno os dejo, ya nos vemos mañana-dijo Take despidiéndose. Chinen entró y subió hasta mi cuarto, yo fui tras él.
-¿Qué hacía aquí?-
-Ni idea, se ha presentado de repente, se aburría-
-Te ha dejado un olor bueno-dijo riendo tapándose la nariz.
-Sí, la verdad es que si...-dije suspirando mientras abría la ventana de mi cuarto- mira que le he dicho veces que no lo haga que no me gusta pero ni caso-
Chinen se sentó encima de mi cama, yo lo miré y fui hasta él.
-Bueno ¿y qué haces aquí?- dije empujándolo para echarlo sobre la cama, poniéndome encima suya con cuidado.
-He venido a verte-dijo acariciándome el torso.
-Eso me gusta- me acerqué a él para besarlo lentamente pero como siempre nos interrumpieron llamando a la puerta.
-Yamachan, hijo-
Me quite corriendo de encima suya sentadome a su lado.
-¿Qué quieres?-
-Era para decirte que tienes que ir a comprar-
-¡¿Ahora?!-repliqué, nos había cortado todo el rollo.
-Sí por favor, que te acompañe Chinen-
Suspire y me puse los zapatos, salimos los dos. Estaba bastante cabreado.
-Yamachan no te enfades~-
-Es que siempre hace lo mismo-
-No pasa nada-me dijo cogiéndome de la mano.
Compramos las cosas y Chinen se volvió a su casa ya que se nos había hecho tarde. Aquel día no sabía lo que me iba a esperar de ahora en adelante.
Al día siguiente, en el recreo me esperaba Takahashi en la azotea.
--
-Hey Chinen- 
-Ah hola Takaki -dije sonriendo -¿Cómo estas?-
-Bien, te andaba buscado-dijo riendo
Takaki era 3 años mayor que nosotros pero su universidad estaba bastante cerca de nuestro instituto, así que en los recreos se acercaba.
-¿Cómo te han ido las clases?-
-Pues la verdad que han estado bastante aburridas-dijo riendo- pero es hora de descansar-
-Yo estaba buscando a Yamachan-dije sonriendo
-Que mono, bueno entonces te dejo, estaré por aquí si eso después nos vemos antes de que entres a clases-
-Gracias-
Y diciendo esto me despedí y fui en busca de Yamachan, tenía muchas ganas de verlo. Después de un rato buscándolo me dijeron que estaba en la azotea, lo cual me parecía raro.
Subí corriendo las escaleras con la ilusión de encontrarlo.
-Yama...- me quedé en silenció en la puerta, estaba con Takahashi y parecía que le estaba diciendo algo importante.
-Bueno ¿y que dices..?-le preguntó Takahashi cabizbaja, algo sonrojada.
-Pues.. que sí... que salgo contigo-
Al oír aquello me quedé frío. Fue como si me hubieran clavado algo. Me empecé a encontrar fatal... no podía sostenerme.Bajé la escaleras como pude y me senté al final. No sabía que hacer las lágrimas me brotaban solas. Intentaba tranquilizarme y no podía. De repente oí unos pasos, era Yamachan.
-¿Chinen?-
Yo tenía la cabeza apoyada en las rodillas, no la quería levantar.
-No me digas qué...-
-¿Estas saliendo con ella?-
-Chinen-se sentó a mi lado- tonto, no te preocupes, estoy saliendo con ella pero no es nada serio, es solo para poder entrar en la universidad que quiero, pero no te preocupes-dijo sonriendo- tonto, te quiero-
-Claro-levante la cabeza sonriendo, estaba destrozado por dentro- Bueno me voy, que tengo que ir a la biblioteca-dije sonriendo
-Te quiero-me dijo Yamachan en voz baja sonriendo.
-Y yo-
Me levanté como pude y fui hasta el patio de detrás del instituto, sentándome en uno de los bancos.

-Continuara--


lunes, 14 de enero de 2013

Secretos capítulo 8

Bueno y como prometí aquí tenéis un capítulo nuevo *^* no es gran cosa pero espero que os guste, ya vendrá lo mejor ewe

Capítulo 8:


-Takahashi-san, ¿te importaría esperarme un momento? Tengo que hablar con un amigo-
-¿Eh? Ah claro, no te preocupes- dijo moviendo ambas manos quitándole importancia
Me acerqué a Chinen, el cual estaba hablando con Takaki.
-Chinen, ¿podemos hablar?-
-¿Eh? –me miro algo confuso- claro-
Me lo llevé lejos de todos para que no nos pudieran oír.
-Te llevas muy bien con Takaki ¿no?-le pregunté algo mosqueado.
-Sí, bueno, es simpático y…-se quedó un momento en silencio mirando- espera… no… ¡¿de verdad?!- me preguntó sonriendo
-¿Eh¿ ¿Q-qué pasa?-dije algo avergonzado
-Tienes celos-
-No es eso… bueno… es que me cambias-
-Yamachan… no seas tonto-dijo esbozando una sonrisa –Sabes que nunca te cambiaría por nadie-
Le sonreí acercándome a él, y mientras lo agarraba por la cintura posé mis labios sobre los suyos.
-Te quiero…-
Volvimos a donde estaban todos, a mí me secuestraron Take para que me fuera con las chicas, mientras Chinen se quedó de nuevo con Takaki, lo cual seguía sin hacerme gracia.
Estuvimos toda la noche riéndonos hasta que a Take se le ocurrió que nos metiésemos en el agua.
-Vamos Takahashi, metete-
-No quiero, déjame-
-Venga anda-dijo cogiéndola, empujándola hacía el agua.
-Anda Take déjala, que no quiere- dije cogiéndole del hombro para que la soltase pero en ese momento Take me empujó hacía la chica haciendo que cayésemos los dos al agua. Me levanté corriendo ofreciéndole la mano a la chica para que se levantara.
-¿Estás bien? –le pregunté preocupado –lo siento…-
-No pasa nada-me dijo con una sonrisa mientras se remangaba la falda para que no se le mojará más. Cuando le vi las piernas se me aceleró el corazón por lo que aparte la vista sonroja. Me quite la camisa de manga corta que llevaba sobre una camiseta, y se la puse por encima.
-Será mejor que vayas a cambiarte o te vas a resfriar…-
-Ah… gracias-dijo la chica sonrojándose –pero tú también deberías cambiarte-
Nos fuimos ambos a la casa para cambiarnos la ropa mojada.
---
-Chinen ¿estás bien?-preguntó Takaki que veía como Chinen no apartaba la mirada de ambos mientras estos volvían a la casa.
-Ah sí... no te preocupes- dijo sonriendo haciendo como si nada ocurriese.
-Chinen, sé que es muy precipitado decir esto pero sé lo que hay entre Yamachan y tú-
-¿Eh?-dijo Chinen confuso sin saber que responder ante eso- ¿l-lo sabes?-
-Sí, me he fijado bien y sé que sois pareja…-
-Ah… oye… -
-No te preocupes no te voy a juzgar- le interrumpió Takaki antes de que pudiese replicar- Te entiendo, además, a mí también me gustan los chicos-
-¿De verdad?-preguntó Chinen abriendo los ojos como platos- pareces el típico chico que se quiere llevar a todas las chicas por delante-
-Ah vaya –respondió riendo- ¿me lo tomo como un halago?-
-Lo siento-dijo Chinen riendo- Pero ¿cómo lo has sabido?-
-Soy muy observador y por lo que veo Yamachan no quiere que se sepa ¿verdad?-
-No… lo hemos mantenido en secreto desde hace mucho tiempo, a mí me encantaría poder gritarlo por ahí pero… sé que eso haría quedar mal a Yamachan así que ocultamos nuestra relación…- contó Chinen algo triste.
-Vaya… con la suerte que tiene-dijo Takaki en una voz casi inaudible- no me parece lo correcto pero tampoco me voy a meter, yo soy una tumba-dijo haciendo como si cerrase una cremallera en la boca.
-Gracias-le dijo Chinen sonriendo ampliamente.
---
Takahashi, entró en su habitación y yo me fui a la mía, cogí unos pantalones nuevos y me cambié pronto de ropa. Mientras estaba recogiendo y poniendo a secar la ropa tocaron a la puerta, abrí y era Takahashi.
-¿Ya te has cambiado?-dije haciéndome a un lado para que pasase
-Sí-dijo sonriendo entrado a la habitación.
-Bueno ahora…-
-¡Yamada-kun!-dijo interrumpiéndome dándose la vuelta mientras me miraba fijamente.
-¿Si?-
-Te quería decir una cosa…-dijo nerviosa y algo sonrojada.
-¿Eh? Ah claro, dime-
-Verás… es que…. Yo quería saber si… saldrías conmigo….-
-¡¿EH?!-me quedé sin palabras ahora no sabía que responderle
-No quiero que me respondas ahora, cuando volvamos al instituto me dices ne? –dijo mientras salía corriendo.
De repente se abrió la puerta y apareció Take.
-¡TIO! ¡¡¡MENUDA SUERTE!!!-me dijo saltando encima mía pasándome el brazo por encima de los hombros.
-¿Eh?-
-Lo he oído todo-dijo riéndose
-¿Nunca te han dicho que no es bueno espiar a los demás?-
-Pero tú eres mi colega, bueno  le vas a decir que si ¿no?-
-¿Eh? No sé…-
-Tío, ¿sabes quién es? Te harías el más popular de todos, además estarías becado a esa universidad que tanto quieres-me dijo mientras me daba con el codo.
-¿A la Universidad de Tokyo?...-le pregunté abriendo los ojos como platos.
-Exacto esa, su padre es el director y encima es monísima y bueno... está bastante buena, muchos chicos van tras ella-
No me podía creer lo que estaba oyendo… pero no sabía que hacer solo tenía tres días para pensarlo…

--Continuara--

domingo, 13 de enero de 2013

Aviso~~





Bueno aquí vuelvo después de cerca de 500 años después *^* ok no, no sé cuando fue la última vez que entre e.e he tenido bastante cosas x.x pero bueno quería hacer esta entrada para avisar de que ya mismo subiré de nuevo mis fanfics e////e jusjusjus espero que le importe a alguien D: es que creo que me ha vuelto la inspiración divina e_e pero bueno era solo eso espero que os guste y que me sigáis leyendo *///*